SONRÍE CON EL CORAZÓN.
“Que bonita idea“
Sonreír con mi corazón me exige que sea sincero, que me relaje, que tome de la mano a la niña o niño que tengo en mi interior, que me permite ser espontáneo.
Si soy sencillo, si soy consciente y suelto mi corazón, podré sonreír como una forma de agradecer tantas cosas maravillosas que tenemos en nuestra vida.
Basta con que deje de ver lo inmediato y vaya más allá, para desde el fondo de mi corazón decir “GRACIAS “
“Sonrió con el corazón“