ENTRE MÁS RESPONSABILIDADES ACEPTES, MÁS PODER TIENES.

¡YO SOY MI PROPIO DUEÑO! Por lo tanto soy responsable de mi vida. No hay nadie que pueda o deba hacerlo por mí.

En los momentos de CRISIS soy el encargado de mi estrés, tolerancia a la frustración y a la incertidumbre. Hay sucesos que me van a afectar y que no están en mi control. Lo entiendo perfectamente y haré lo que pueda para que mi responsabilidad ayuda a contribuir a una resolución.

TODOS LOS DÍAS VOY A PENSAR: 

• ¿Cómo mejoro mi manejo a la frustración?

• ¿Qué me motiva para mejorar?

• ¿Por qué me motiva?

¡Entre más responsabilidad aceptes, más poder tienes!

JOCA

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