RESPIRA DESPACIO Y PROFUNDO TODO EL DÍA.

¡Soy el aire que sostiene mi vida! Es maravilloso, respiro despacio y profundo porque es mi vida la que depende de esta acción, que oxigena todo mi cuerpo y mis procesos mentales, que me hace liviano para todo lo que se me presente, lo bueno y lo que es un reto. Si respiro profundo todo el día estoy atento y contento. Vivo plenamente, vivo consciente.

“Respiro es mi vida”